Presionado por las Agencias de Calificación Moody’s y Fitch, el Ministro De Guindos aumentó el 27 de agosto de 2013 en 4.000 millones de euros el Aval del Estado que concedió Elena Salgado el 14 de enero de 2011 por un importe de 22.000 millones.
Nuestro mayor mercenario financiero, exconsejero de ENDESA meses antes de ser nombrado Ministro de Economía, recibió las insinuaciones de las dos principales Agencias de Calificación de riesgo, al conocer que el desequilibrio entre los gastos que genera el Gobierno con sus lamentables políticas energéticas y los ingresos en concepto de recibos que abona la sociedad por la Luz, presuntamente se debía más bien a un montaje político perpetuado en el tiempo, que a un resultado económico accidental de la propia mecánica del sistema energético. La no voluntad de resolver este principal problema 'virtual' por parte del Gobierno, es el principal sospechoso que alerta a estas Agencias de Calificación.
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El Gobierno se salta su propia Ley
En pleno desarrollo del Anteproyecto de Ley del Sector Eléctrico, aprobado el 26 de diciembre de 2013, el Gobierno decidió incorporar una Disposición adicional por la cual se establece que los derechos de cobro correspondientes a déficit de ingresos del sistema de liquidaciones generados desde 1 de enero de 2013 no podrán cederse al Fondo de Titulización del Déficit del Sistema Eléctrico (FADE).
A pesar de insistir el Ministro de Industria, Jose Manuel Soria, de haber acabado con el problema del ‘Déficit de Tarifa’, la realidad es muy distinta. El Gobierno a pesar de prohibir la cesión al FADE de este ‘desequilibrio virtual’, ha seguido emitiendo bonos como se puede comprobar en los documentos adjuntos.
En definitiva, quien hace la Ley y obliga a cumplirla es el primero en incumplirla.
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