Un informe secreto en su época y encargado por Felipe González al sociólogo James Petras hace más de 20 años, deja en evidencia que o no se actuó, o no se quiso actuar, pero que las altas esferas sabían el modelo de sociedad a la que España se encaminaba, donde por primera vez en la historia conocida española, una generación iba a vivir peor que la generación anterior. Quédense con ésta frase: “La contradicción de haberse criado entre algodones y un futuro incierto puede generar un miedo y frustración social en los jóvenes, que, si no se encauza a través de políticas de clase social, puede degenerar en violencia individualizada“
La sociedad española se dirigía inexorablemente a ser testigo y protagonista de ver a la primera generación de su historia que viviría peor que lo hicieron sus padres. Ésta frase, demoledora donde las haya y que ya en 1995 emergía, hoy 20 años después y sin cambios políticos sustanciales que decidieran corregirla, es una realidad. En concreto el “informe Petras” estudiaba la generación pre y post democrática y las comparaba con gran minuciosidad y acierto.
Este demoledor informe ofrece apartados de suma importancia que aconsejamos al lector se descargue en este enlace INFORME PETRAS-PDF y que la Plataforma QAE ha recuperado del cajón de los recuerdos, pues eso fue precisamente lo que hizo el gobierno del PSOE en aquella época.
Cabe destacar que la política se dirigía a limitar la participación ciudadana, al desinhibirla de cualquier interés político. La nueva generación de jóvenes-adultos permanecerían en un ‘letargo controlado’ , concluye el profesor Petras en su informe.
La centralidad del mercado como el principal mecanismo para la modernización ha reforzado los lazos entre los negocios y el Estado, y ha fomentado los valores mercantiles dentro de la clase política. El resultado ha sido que la corrupción a gran escala ha impregnado el sistema político, minando la ciudadanía.
Con ello se consigue que, a pesar de ser consciente la Sociedad, esta permanezca aislada del problema sin reaccionar pues se la ha educado en que el máximo órgano protector de los ciudadanos siempre es el Estado, el cual ha comenzado a ser corrupto desde sus instituciones.
En conclusión, el informe afirma que:
Aunque la calidad de vida de los jóvenes trabajadores era mejor que la de sus padres mientras estaban creciendo, las perspectivas de futuro son mucho más negativas. Además, como les han mimado y satisfecho todos sus deseos de consumo, carecen del empuje y la iniciativa para cambiar su estatus.
La contradicción entre haberse criado entre algodones y un futuro incierto genera un miedo y frustración social en los jóvenes.
La mayoría de los trabajadores de ambas generaciones se sienten víctimas pasivas más que protagonistas de los cambios a los que se enfrentan.
Aunque ha aumentado la renta nacional, la participación en ella de la clase trabajadora ha disminuido, y en particular el porcentaje de salarios que corresponde a los jóvenes trabajadores ha sido el que ha bajado más. Al trabajar en la economía sumergida, con sueldos por debajo del salario mínimo, o en los supuestos contratos de aprendizaje, los jóvenes empleados reciben salarios por debajo del nivel de subsistencia.
Una reducida clase política ha marginado al grueso de la clase trabajadora de lo público y de la consulta política. El resultado es una generación mayor de trabajadores frustrados y ansiosos, y una generación joven marginada y apolítica. El “libre mercado”, como el mecanismo elegido para lo que se suponía iba a ser la modernización de España, ha debilitado los lazos entre la clase trabajadora y la clase política, y ha fortalecido las estructuras estatistas-autoritarias a expensas de la sociedad civil y de la consulta pública.
Muchos vivirán en la más absoluta precariedad para que un pequeño grupo pueda lucrarse más aún en detrimento de la juventud.
Puedes descargar el INFORME PETRAS en formato PDF TOTALMENTE GRATIS pulsando en esta imagen: